[Reseña Manga] No soy un ángel

No soy un Ángel es la primera serie larga que realizó Ai Yazawa y la que le dio fama como autora en Japón. Aquí en España nos ha llegado bastante tarde, pero la espera a merecido la pena ya que Planeta deAgostini ha editado su formato kanzenban compuesto de 4 tomos, de los 8 originales.

En un principio esta edición fue muy críticada por el tema de las páginas a color, pero es que en el original japonés también jugaban con las portadillas en monocromo junto al color de la sobrecubierta, así que ya no hay más discusión que valga, porqué el original también era así, por mucho que nos fastidie a algunos.

Nos cuenta la historia de Midori Saejima en el Instituto Hijiri junto a los demás miembros del Consejo Escolar. Midori está enamorada de Akira desde el primer día que le vió, pero como es tan tímida no se atreve ni ha dirigirle la palabra... hasta el día que ambos formaran parte del Consejo Escolar y empezarán una amistad que irá más allá.

Nos encontramos con un shôjo típiquísimo en TODOS los sentidos. Ella es una chica muy inocente y buena persona y él es típico chico que va de duro pero en realidad es un trozo de pan. A su alrededor tenemos a personajes de todo tipo, como el inocente de Ken, la borde de Mamiya o el guaperas de Takigawa. Todo ello con un argumento de shôjo típico de instituto y situaciones de lo más previsibles a los acostumbrados al género.

¿Pero qué hace especial esta obra de los demás shôjos de instituto? El sello Ai Yazawa. Aunque el dibujo sea antiguo, Ai Yazawa ya sabía crear situaciones que te mantuvieran pegado a la historia sin soltar el tomo. Porqué señores, os aconsejo leer las obras de esta mujer del tirón para no dejarse ningún detalle.

Puedo decir sin cortarme que es la peor serie que he leído de Ai Yazawa (sin contar Tempestad Color Cereza por ser tomo único). Pero no peor en el sentido de ser una mala historia, sino que si has leído todo lo demás de la autora, esta obra es de lo más light que tiene y no gustará a todo el mundo por sus situaciones previsibles, pocos giros argumentales y personajes bastante estereotipados (si, para mi Historia de un Vecindario es mejor, aunque sé que para la gran mayoría no es así...)

Tengo que confesar que dejé la serie aparcada unas semanas. Una vez la tuve completita en mi mangateka, me puse a leerla y... la primera mitad del primer tomo me pareció ABURRIDÍSIMA. Me supo fatal, porqué nunca antes me había pasado con una serie de esta mujer, ni con Tempestad Color Cereza... así que bueno, dejé el tomo a la estantería y seguí con otras lecturas... hasta que le di una 2ª oportunidad... y cuando empieza el tema de Hiroko me empezó a enganchar... pero hasta entonces me pareció un coñazo de shôjo.

Los personajes no me mataron en absoluto, en especial Midori... es más, es de las típicas protas que le daría de ostias cuando llora... me ponía de los nervios porqué se pasa 3/4 de la historia llorando! No entiendo como no se deshidrataba. Respecto a Akira, es el típico prota shôjo, aunque cierta acción suya me sorprendió y ahí ganó puntos, aún así, su pensamiento hacia el final no me gustó nada, peor que Midori. El único personaje que me cayó en gracia fue Ken (vale me habéis pillado, porqué es clavadito a Tsutomu en físico y personalidad) pero realmente es el que queda más mal parado en su relación sentimental... ¡quiero una historia entera de esta personaje! ¡Larga vida a Ken!

En resumen, recomiendo No soy un ángel a quien le gusten los shôjo ñoños de instituto, pero ni os acerquéis si no os va el género, por mucho que sea de Yazawa, es lo más pasteloso que ha hecho.

Nota: 7